1 – Miedo, ansiedad o estrés
Cuando nuestros pequeños desarrollan estos sentimientos muy probablemente comiencen a comportarse “mal”, será como si todo lo que ya habían aprendido se les olvidara, y esto se debe a que hay un descontrol muy fuerte en su cuerpo cuando sufren de estas emociones negativas.
Para contrarrestar este comportamiento, debemos saber qué es lo que tiene alterado a nuestro compañero, ¿algo en casa ha cambiado? ¿nuevos vecinos? ¿has cambiado de trabajo? ¿pasas más tiempo fuera? Trata de reforzar tu vínculo con él, juega más, dedícale un poco más de tiempo, demuéstrale afecto, esto hará que recupere su confianza y autoestima.
2 – Marcaje
Es de todos bien sabido que la orina es un elemento usado por muchos animales para marcar su territorio. Si tu perro orina ciertas zonas de la casa, quiere indicar que esos espacios u objetos son de su pertenencia.
Para eliminar este comportamiento debes comenzar por eliminar adecuadamente el aroma de los lugares que ya ha marcado con anterioridad, no lo hagas con químicos que incluyan amoniaco, sino con limpiadores enzimáticos o naturales como el vinagre y los cítricos.