Debemos comenzar diciéndote que el hecho de que seas tú quién realiza el baño, va a reducir considerablemente el estrés que siente tu mascota, por lo que toma este punto a tu favor y prepara el baño cómodamente para conseguir que pase de ser un infierno a un deleite.
Lo primero a considerar es escoger un lugar adecuado y seguro, dónde tu perro se sienta tranquilo y no pueda salir corriendo, no importa si usas tina o regadera. Debes quitar todo aquello que no es indispensable para su baño (todos los productos de uso humano, cubetas y demás), ya que esto tendrá el área despejada, permitirá mayor movilidad y evitará esos espantosos ruidos que hacen las cosas al caer y que normalmente alteran a nuestra mascota.