1. Lleva contigo una bolsita de premios/snacks.
2.Al llegar al lugar escogido, suelta a tu perro y comienza a caminar.
3.Camina siempre dándole la espalda, por lo que, si se te adelanta, gira y camina en el sentido contrario.
4.Cuando note que has dado vuelta y regrese hacia ti, prémialo con uno de esos snacks.
5.Poco a poco irás dando menos premios/snacks y los cambiarás por otro tipo de recompensas como caricias o expresiones de felicitación (“muy bien”, “bien hecho”, “bravo”, etc.)
6.Realiza este ejercicio una vez al día, durante 10 minutos aproximadamente. Trata de cambiar los lugares que visitan para mantener su atención, y conforme avance en su progreso visita lugares más conocidos.
Siguiendo estos pasos de manera constante, te darás cuenta de que después de unas semanas, tu perro siempre estará al pendiente de dónde te encuentras, lo que nos permitirá soltarle la correa con más frecuencia, ya que estaremos mucho más confiados de su respuesta.